Me llamo Julia. Desde niña, al leer tantos cuentos de hadas, siempre soñaba con encontrar a un príncipe azul y con vivir felices y comer perdices. Sin embargo, siempre me ha salido todo mal y ya llegué a un punto en el que casi tiro la toalla. No tenía ni el más ligero atisbo de esperanza de que mis sueños pudieran hacerse realidad. Hasta que lo conocí a ÉL. Nos conocimos en Dating.com hace casi dos años. Es fantástico poder encontrar el amor incluso al otro lado del mundo. Tanto él como yo teníamos nuestra propia historia, corazones rotos, y casi habíamos perdido la fe y la confianza en las personas. Sin embargo, fuimos bastante afortunados de encontrarnos aquí. Después de chats y videollamadas interminables y largos viajes para vernos, tardamos casi un año en conocernos en profundidad. Desde el primer segundo ambos comprendimos que habíamos tomado la decisión correcta y que estábamos hechos el uno para el otro. No fue fácil para nosotros, pero lo mejor es que aprendemos el uno del otro, nos comprendemos y nos apoyamos. Fue un largo camino hasta que nos encontramos y dimos el primer paso para iniciar una relación seria y no solo chatear en línea. Lo único que lamento es no haberlo hecho antes. Ahora, en las cálidas y acogedoras tardes con una taza de té en la mano, solemos recordar algunos momentos divertidos y agradables de cuando chateábamos en línea y hacíamos planes para el futuro. ¿Teníamos miedo al principio? Claro que sí. ¿Estamos contentos ahora? Sin duda alguna. Y estamos seguros de que nos esperan más momentos felices juntos en el futuro. Todos mis deseos se han hecho realidad. Stefan ha sido capaz de hacer cumplir todos mis sueños.

