Nuestra historia comienza con los halagos de un hombre hacia una mujer y el fino sentido del humor de ella para superar cualquier barrera entre ellos. Una noche Don decidió escribirme por Dating.com, y su estilo y forma de ser me llamó de inmediato la atención. A él le atrajo mi agradable forma de ser y mi buen sentido del humor. La verdad es que congeniamos desde el primer momento a base de humor y forma de ver la vida. Conforme hablábamos cada vez más, nos dimos cuenta de que compartíamos más de lo que ambos podíamos creer. En un instante de risas y locura, en el que él quería que yo me fuera a Tampa y donde yo quería que fuera él quien viniera a Barcelona, decidimos tomar esto en serio y quedar en Medellín, que es la ciudad donde yo (Samy) crecí. Al principio todo parecía una fantasía, pero decidimos hacerlo realidad. Pusimos todo en orden y decidimos darnos la oportunidad de dar el siguiente paso y vernos cara a cara, ya que sería el requisito infalible para saber si realmente estamos hechos el uno para el otro. El encuentro fue mágico para ambos, parecíamos estar como en una película, porque la química que sentíamos al conversar se transmitía en la vida real. Yo no hablo bien inglés y él no sabe absolutamente nada de español, pero con un traductor, dibujos y gestos graciosos pudimos transmitir todo lo que cada uno sentía por el otro y dar el siguiente paso. Por el momento todo ha sido mágico y queremos ver qué más cosas pueden pasar en los siguientes capítulos de nuestra hermosa historia.
